2 nov 2013

La transformación en lector

   «Es bueno que ciertas cosas, que ya no pueden transformarse en otras, consten, simplemente, sin lamentar los hechos ni tampoco juzgarlos. Fue así que comprendí claramente que yo nunca sería un verdadero lector. Cuando era niño se me antojaba que la lectura era una profesión que debía ser asumida más tarde, un día, cuando llegara el momento de las profesiones, una tras otra. A decir verdad, no tenía una idea precisa de cuándo podría ocurrir esto. Confiaba en que se advertiría cuando la vida, en cierto modo, cambiara repentinamente y sólo le viniera a uno de afuera, así como antes surgía de adentro. [...]

27 oct 2013

Aquel rostro

   «El niño cambiaba, crecía. Una semana de indolencia bastaba para ablandarlo; una tarde de caza le devolvía su firmeza, su atlética rapidez. Una hora de sol lo hacía pasar del color del jazmín al de la miel. Las piernas algo pesadas del potrillo se alargaron; la mejilla perdió su delicada redondez infantil, ahondándose un poco bajo el pómulo saliente; el tórax henchido de aire del joven corredor asumió las curvas lisas y pulidas de una garganta de bacante. El mohín petulante de los labios se cargó de una ardiente amargura, de una triste saciedad. Sí, aquel rostro cambiaba como si yo lo esculpiera noche y día».


(YOURCENAR, Marguerite. Memorias de Adriano. 1ª ed., 21ª reimp. Barcelona: Edhasa, 1991, p. 131).

20 oct 2013

Otoño llameante


Otoño  (1896), de Alfons Mucha


El viento despierta,
barre los pensamientos de mi frente
y me suspende
en la luz que sonríe para nadie:
¡cuánta belleza suelta!
Otoño: entre tus manos frías
el mundo llamea.


Otoño

(1933)


Octavio Paz

3 oct 2013

Bajo este cielo desleído

   «No sé que suerte de inclemencia está cayendo a plomo sobre el paisaje. La carretera, con trazas y mañas de río, simula apacibles aguas cristalinas y se aleja bajo la llovizna. El esplendor de la hierba todavía no es más que una promesa bajo el cielo de mármol uniforme, sin mácula, sin una grieta de luz. Más allá de semejante atmósfera atribulada se esconden auroras radiantes y rosadas nubes de algodón.

28 sept 2013

¿De dónde se es?

Staroměstské náměstí v Praze - 
Plaza de la Ciudad Vieja de Praga


«No se es de un lugar porque en él se haya nacido, sino porque en él se haya prendida la mirada».


(ZAMBRANO, María. Algunos lugares de la pintura. Madrid: Espasa-Calpe, 1989, p. 259).

25 sept 2013

El brillo de las estrellas

La noche estrellada  (1889),  de Vincent van Gogh
«John Farmer estaba sentado a la puerta de su casa una tarde de septiembre, tras una dura jornada de trabajo, repasando en su espíritu, más o menos, la labor cumplida. Después de haberse dado un baño, fue a sentarse en paz para recrear su persona intelectual. Era un atardecer frío, y algunos de sus vecinos expresaron sus temores de una helada inminente. Poco llevaba dejándose conducir por el tren de sus pensamientos cuando oyó que alguien estaba tocando la flauta, sonido que tan bien armonizaba con su talante del momento.