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5 mar 2016

Waldstein


En femenino,  de Li-Shu Chen
   «La casa Waldstein ha estado inextricablemente arraigada a la cultura, el comercio y la historia del reino de Prusia y de la nación alemana desde mediados del siglo XVIII, y, en reconocimiento de ello, el primer Kaiser Guillermo elevó a mi padre a la nobleza, y no sólo a la nobleza sino a la Freiherrschaft. ¿Espera usted que yo envía a mi hija, que nació baronesa, con un apellido que está en todos los libros escolares, a un país donde podría no ser considerada enteramente blanca? –le temblaba la voz.
   –Pero usted me dijo que no tenía objeciones en principio.
   –Eso era aquí. Suponíamos que usted se quedaría aquí, que sería pintor... Usted parece tener talento, la gente compra sus cuadros... Le aseguro que no tuve ninguna intención de enviar a mi hija a América. ¡Ninguna! –Hizo una pausa para recobrar el aliento.
   Su cara me dijo que el tema estaba cerrado. Silencio. Pude oír los latidos de mi corazón».


(SOLMSSEN, Arthur R.G.  Una princesa en Berlín. 2ª ed. Barcelona: Tusquests, 2012, p. 479).

11 nov 2012

La estrella de Valdštejn

Albrecht von Wallenstein
   «El viaje empezó a resultarle largo.
   Tras un cuarto de hora, Waldstein se dio cuenta con asombro de que ya no avanzaban sobre las piedras de las calles de Praga, sino por una carretera reblandecida por la lluvia, a campo traviesa. El hombre que se hallaba sentado a su lado sin pronunciar palabra abrió entonces una de las ventanas del coche. Notó la fresca brisa otoñal y percibió el olor a tierra mojada. De un bosque cercano les llegó el susurro del viento y el grito de una lechuza. Parecía que se acercaban a una aldea o a una hacienda, pues se oía el ladrido de unos perros y el mugir de las vacas. Era una aldea. Al pasar oyeron una melodía procedente de un mesón, un violín y una gaita.