¡Abril
las aguas mil las aguas llueve!
Fiel
de un reflejo intemporal, el agua
Cruzó
en la luz de un cielo sin espacio;
Entró
en Abril de Abriles mil desnuda,
y al
cielo limpio, Abril los cielos mil,
sus
lunas va clavando en altas noches
que,
en nubes mil, el cielo le devuelve
deshecho
en flor –en nubes mil– de lluvia.