Ágora donde iniciar historias sobre libros, naturaleza, arte y poesía; donde hallar las palabras soñadas o queridas, sin la perspectiva del tiempo... como en una biblioteca.
27 feb 2018
22 feb 2018
El encuentro
Adan y Eva (1909), de Edvard Munch
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«No me reconociste entonces. Y cuando dos
días más tarde tu mirada me envolvió con una cierta familiaridad al volver a
encontrarnos, no reconociste en mí a aquella niña que te había querido y a la
que habías hecho despertar, sino sólo a la hermosa joven de dieciocho años que
se había cruzado en tu camino dos días antes en ese mismo lugar. Me miraste
agradablemente sorprendido, se te escapó una leve sonrisa. Volviste a pasar de
largo pero retrocediste enseguida: yo temblaba, estaba exultante de alegría,
rogaba que me hablases.
14 feb 2018
13 feb 2018
La mal llamada "sociedad libre"
Bond of union (1956), de M.C. Escher
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9 feb 2018
3 feb 2018
Atardecer
Bosque de Allerbos (Bélgica)
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«El atardecer temprano de febrero se asomó,
cansado y huraño, a la habitación 12, con ojos de penitente enrojecidos por el
llanto. Las paredes grisáceas de la habitación parecían diluirse en la penumbra
del mismo color y la cruz de madera negra flotaba en el aire. Las camas de
hierro sólo eran visibles como contornos borrosos. La atmósfera crepuscular
gravitaba como un encantamiento sobre los niños que compartían de dos en dos
cada lecho. En algún rincón oscuro lloraba en voz baja una niña desconsolada,
otra hablaba con voz suave y cuidadosa como si estuviese junto a la cama de su
madre enferma, y una niña pequeña cerca de la ventana estaba en la almohada con
los brazos alrededor de las rodillas.
31 ene 2018
29 ene 2018
Los libros arden mal
Llamaradas, de Li-Shu Chen
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El mando apuraba la voz. Pero aquello no se
podía hacer de cualquier manera, a lo bruto. Cada trabajo requiere su ritmo, y
ninguno de nosotros recordaba haber cargado restos de libros quemados. Las
herramientas tampoco. Ellas y nosotros estábamos acostumbrados a recoger las
hojas caídas, al olor de las cenizas de otoño, que le daban a la ciudad un
aroma medicinal. Más que de humo habría que hablar de eso, de un aroma. Era una
naturaleza a la que le había llegado su tiempo. En cambio, lo que hoy ardía era
el tiempo. En eso sí que reparé. No dije nada, pero lo pensé.
23 ene 2018
Ese grito
«Eduard Munch escuchó que el cielo gritaba.
Ya había pasado el crepúsculo pero el sol
persistía, en lenguas de fuego que subían desde el horizonte, cuando el cielo
gritó.
Munch pintó ese gritó.
Ahora, quien ve su cuadro se tapa los oídos.
El nuevo siglo nacía gritando».
(GALEANO, Eduardo. Espejos
: una historia casi universal. México: Siglo XXI, 2008,
p. 238).