Ágora donde iniciar historias sobre libros, naturaleza, arte y poesía; donde hallar las palabras soñadas o queridas, sin la perspectiva del tiempo... como en una biblioteca.
12 jun 2015
3 jun 2015
Noches del mes de junio
ciertas noches de junio de aquel año,
casi borrosas, de mi adolescencia
(era en mil novecientos me parece
cuarenta y nueve)
porque en ese mes
sentía siempre una inquietud, una angustia pequeña
lo mismo que el calor que empezaba,
nada más
que la especial sonoridad del aire
y una disposición vagamente afectiva.
casi borrosas, de mi adolescencia
(era en mil novecientos me parece
cuarenta y nueve)
porque en ese mes
sentía siempre una inquietud, una angustia pequeña
lo mismo que el calor que empezaba,
nada más
que la especial sonoridad del aire
y una disposición vagamente afectiva.
1 jun 2015
28 may 2015
24 may 2015
Promesas y oportunidades
Librería Atlantis
Books – Santorini (Grecia)
|
«Al abrir la
tienda producía en Florence, cada mañana, la misma sensación cargada de
promesas y oportunidades futuras. Los libros estaban bien alienados como las
verduras del huerto de la señora Gipping. Dispuestos para todos los visitantes.
Milo vino a la hora
del almuerzo.
–¿Qué? ¿al final va
a encargar a Lolita?
–Todavía no lo he
decidido. He pedido un ejemplar de lectura. Estoy algo desconcertada por lo que
han dicho sobre ella los periódicos americanos.
21 may 2015
Distracciones nocturnas
Sí,
es cierto que las primaveras te necesitaban. Algunas estrellas
requirieron
que tú las contemplases. Una ola
se
alzó hasta ti desde el pasado, o cuando
pasando
por delante de una ventana abierta
las
notas de un violín se te entregaron. Todo eso era una orden.
Pero,
¿pudiste cumplirla? ¿No estabas siempre
distraído,
a la espera, como si todo te anunciara
una
amante? (¿Dónde podrías esconderla
si los grandes y extraños pensamientos entran y
salen de ti
y a menudo se quedan por la
noche?) 16 may 2015
6 may 2015
Diálogo de las flores
«Ese romanticismo aéreo y volador presta alas a todas
las cosas de la tierra. El misterio pasa de la sustancia a su atmósfera. Todo
conspira para dar al ser aislado una vida universal. Cuando yo escuchaba
madurar las ciruelas, veía el sol acariciando todas las frutas, dorando todas
las redondeces, puliendo todas las riquezas. El verde arroyo, en su leve
cascada estremecía las campanas de la aguileña. Volaba un sonido azul. El
racimo de flores lanzaba trinos sin fin en el cielo azul.
30 abr 2015
Escribir sí
«Ganesha es panzón, por lo mucho que le gustan los caramelos, y tiene orejas y trompa de elefante. Pero escribe con manos de gente.
Él es maestro de iniciaciones, el que ayuda
a que la gente empiece sus obras. Sin él, nada en la India tendría comienzo. En
el arte de la escritura, y en todo lo demás, el comienzo es lo más importante.
Cualquier principio es un grandioso momento de la vida, enseña Ganesha, y las
primeras palabras de una carta o de un libro son tan fundadoras como los primeros
ladrillos de una casa o de un templo».
(GALEANO, Eduardo. Espejos
: una historia casi universal. México: Siglo XXI, 2008,
p.16).