26 feb 2023

El amor y la vida

Las acomodaciones de los deseos (1929),
de Salvador Dalí

«Y como yo estaba lleno de un amor que andaba todavía un poco bravo por el mundo, todavía un poco errático, girando en torno de la amada pero sin acabar de confundirse y colmarse definitivamente en ella, entonces ocurría que me paraba a contemplar no importa qué, una hierba silvestre o el paso de una nube, y con eso alcanzaba por un instante la intensidad que el amor exigía pero que al mismo tiempo me negaba. Quizá yo empezaba a intuir que así es como la vida nos mueve y nos enreda, y nos fatiga sin desmayo, porque si no alcanzamos lo que anhelamos, el corazón lo perseguirá cada vez con más saña, pero si lo logramos, o creemos lograrlo, añoraremos el anhelo que poníamos en la persecución. ¡Entonces si éramos jóvenes e incansables! Entonces, siempre entonces.

19 feb 2023

País de niebla

En invierno está mi amante
entre los animales del bosque.
Debo regresar antes del alba,
la zorra lo sabe y ríe.
¡Cómo tiemblan las nubes! Y cae
sobre mi cuello de nieve
una capa de hielo quebradizo.

En invierno es mi amante
un árbol entre los árboles e invita
a los cuervos, abandonados por la suerte,
a su hermoso ramaje. Ella sabe
que el viento, cuando oscurece,
levanta su rígido vestido de noche, adornado
de escarcha, y que me manda a casa.

En invierno está mi amante
entre los peces y es muda.
Esclavo de las aguas, que mueve desde dentro
la línea de sus aletas,
estoy en la orilla mirando,
cómo se sumerge y se vuelve,
hasta que los témpanos me expulsan.

Y de nuevo, alcanzado por el grito
de caza del pájaro que tensa
sus alas sobre mí, me caigo
en pleno campo; ella despluma
a las gallinas y me tira una blanca
clavícula. Me la pongo en torno al cuello
y me marcho a través de la amarga pelusa.

Infiel es mi amante
sé que a veces vuela
con zapatos altos hacia la ciudad,
besa en los bares con la pajita
las copas en la boca, hasta el fondo,
y se le ocurren palabras para todos.
Pero yo no entiendo ese idioma.

Yo he visto el país de niebla
he comido el corazón de niebla.

6 feb 2023

Despreciados

Nos dejan tan a solas en la dirección que tomamos
como a dos en los que su error se probó cierto,
que a veces nos sentamos al borde del camino,
con cierto aire travieso, vagabundo, seráfico
e intentamos no sentirnos abandonados.



(FROST, Robert. Poesía completa. Ourense: Linteo, 2017, p. 61).