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Éste es el color de mis sueños (1925), de Joan Miró |
«En 1947, la
India se convirtió en un país independiente.
Entonces
cambiaron de opinion los grandes diarios hindúes, escritos en inglés, que se
habían burlado de Mahatma Gandhi, personajito ridículo, cuando lanzó, en
1930, la marcha de la sal.
El Imperio
británico había lanzado una muralla de troncos de cuatro mil seiscientos
kilómetros de largo, entre el Himalaya y la costa de Orissa, para impedir el
paso de la sal de esta tierra. La libre competencia prohibía la libertad: la
India no era libre de consumir su propia sal, aunque era mejor y más barata que
la sal importada desde Liverpool.