¿Por
qué se apagó la lámpara?
La
protegí con mi manto para resguardarla del viento, por eso se apagó la lámpara.
¿Por
qué se marchitó la flor?
¿Por
qué se secó la corriente?
Hice
un dique en ella para tenerla sólo para mí, por eso se secó la corriente.
¿Por
qué se rompió la cuerda del arpa?
Traté
de forzar una nota que no alcanzaba, por eso la cuerda del arpa se rompió.
(TAGORE, Rabindranaz. El jardinero. Madrid:
Edaf, 2001, p. 121).
No hay comentarios:
Publicar un comentario